Hola a tod@s!!!
Aquí estoy para hacer mi presentación oficial.
Hola me llamo Elia y tengo poco más de 40 años. Siempre he sido esa chica diferente que existe en algunos grupos y que en vez de ir de compras al súper prefiere ir a por dados y figuras en miniatura de razas inexistentes.
Para mí todo empezó cuando mis padres me contaban historias sobre todo de Disney, lo común en aquellas épocas, antes de apagar la luz por las noches. Vivía por entones en un pequeño barrio al norte de madrid.
Cuando aprendí a leer me regalaron cómics, que tienen pocas palabras, de “Astérix y Obélix” y de “Tintín” que de tanto repasarlos aún me sé muchos de ellos de memoria. Hoy en día la estantería del salón luce con orgullo esas dos magníficas colecciones, algo amarillentas ya.
De ahí pasé a “los cinco” y los libros de “crea tu propia aventura” pasando por los de Barco de Vapor y otra colección completa, la de Julio Verne. Tuve mi época futurista con Isaac Asimov y por fin llegue a la literatura juvenil fantástica de manos de Tolkien y su tremenda Tierra Media; ¡ya no había quien me parase!, “Reinos Olvidados” y “Dragonlance” también pasaron por mis manos antes de terminar en la misma estantería.

Si no recuerdo mal fue con 16 años cuando descubrí los juegos de rol. Nieves, mi mejor amiga del cole, vivía en Alcobendas y jugaba con un grupo de amigos los fines de semana. En vacaciones me iba con ella a vivir aventuras en la piel de un elfo Silvano o de una contrabandista espacial dependiendo de quien dirigiese la partida ese día. Jugabamos al “Star Wars“, por entonces de dados de seis; al “Drácula“, al “Señor de los Anillos“, al “Dungeons and Dragons” o a cualquier otro. ¡Qué ilusión me hizo no solo leer libros de esa temática sino ser parte de ella y estar creando mini historias en esos mundos!.
Con 18 años nos mudamos a Sanse (San Sebastián de los Reyes) pues mis padres consideraron que la casa en la que vivíamos en Virgen del Cortijo se quedabas corta para tres niños que no paraban de crecer. Mis hermanos ganaron una habitación independiente y los tres un tobogán-escalera con el que volver loca mi madre.
Para mi beneficio laboral no conocí las MMO hasta el último curso de carrera, de no ser así, puede que no terminase ni me licenciase en “Ciencias de la Actividad Física y el Deporte” ni trabajaría en ese mundo hoy en día. Pensar por un momento el paso ¡tan grande! que supuso poder manejar un personaje dentro del ordenador después de tantos años de papeles y fotos en blanco y negro, pues no había mucho más dinero para tonterías.
El tiempo pasó y la vida siguió su curso. Hubo épocas de mucho trabajo y veranos locos llenos de viajes increíbles. Años buenos y años malos en los que siempre encontraba alguna tarde libre para jugar online con mi hermano. Más o menos frecuentes fueron las noches de los viernes para continuar las partidas.

Cumplí los 40 y en vez de renovar la cocina me dio por compartir mi afición por el rol, la literatura fantástica y los viajes y… ¡Por aquí ando!.
Ya sólo me queda deciros que sois bienvenid@s y que es un placer estar en esta nueva aventura; dispuesta a descubrir otro mundo más junto a tod@s aquell@s que os animéis a la experiencia.
